La uveítis corresponde a la inflamación de la capa intermedia del ojo llamada úvea, la inflamación su enrojecimiento e hinchazón. Esta capa es altamente vascularizada por lo cual la uveítis puede causar un daño importante al tejido del ojo y provocar la pérdida de la visión.
La uveítis o inflamación de la úvea puede ser por causas idiopáticas, enfermedades autoinmunes, infecciones, síndrome oculares o secundaria a procesos neoplasicos. La mayoría de casos corresponden a causas no relacionadas con otras enfermedades y por lo tanto se consideran idiopáticas.
Las enfermedades autoinmunes más relacionadas con la uveítis son la espondilitis anquilosante, artritis psoriásica, artritis reactiva, vasculitis, sarcoidosis y la enfermedad de Behçet.
La uveítis suele provocar dolor ocular, ojo rojo, viisón borrosa y parpadeo excesivo. Existe varios tipos de uveítis según la localización o área comprometida de la úvea:
Una persona con esta enfermedad puede presentar:
Recuerda que aunque tengas uno o más de estos síntomas, debes confirmar el diagnóstico con tu profesional de la salud.
Puede existir otras manifestaciones además de las descritas, que son menos frecuentes.
Los siguientes signos y síntomas indican que debes acudir al servicio de urgencias , si la enfermedad ya es una urgencia acude inmediatamente o en horas:
Puede existir otros signos de alarma además de los descritos, que son menos frecuentes.
Sin el tratamiento adecuado, esta enfermedad puede causar:
Puede existir otras complicaciones además de las descritas, que son menos frecuentes.