En general enfermedades como la hipertensión arterial y la dislipidemia (colesterol alto) son la causas principales. Unos hábitos de vida saludables como disminuir el consumo de tabaco y alcohol, de harinas, de grasas, de sodio (sal) y ejercicio aeróbico pueden ser de gran ayuda. Así mimo controles médicos rutinarios y adherencia al tratamiento médico.