La tomografía computarizada es una técnica no invasiva que permite visualizar las arterias coronarias y detectar en ellas la presencia de lesiones. Se trata por lo tanto, de una coronariografía no invasiva (ya que no se necesita la punción de una arteria y la introducción de catéteres), que solo ayuda en el diagnóstico pero no permite el tratamiento de las obstrucciones en las arterias coronarias.
Este examen consiste en un método imagenológico que utiliza rayos X para crear imágenes detalladas del corazón y los vasos sanguíneos,y de esa manera identificar la ubicación y la extensión de la placa calcificada en las arterias coronarias, también puede usarse para detectar anomalías estructurales del corazón, de los vasos sanguíneos principales, de los pulmones y de las estructuras de soporte del interior del tórax.
Dado que el procedimiento usa medio de contraste, si se tiene antecedente de insuficiencia renal es posible que se requieran métodos de preparación adicionales.
Algunas personas pueden sentir incomodidad permaneciendo acostadas sobre una mesa dura. El medio de contraste administrado a través de una vía intravenosa puede causar:
Estas sensaciones son normales y usualmente desaparecen al cabo de unos pocos segundos.
No se presenta ningún síntoma posterior al procedimiento.