Puede tratarse de un problema de tendón de Aquiles por la localización del dolor. Si aparece con el movimiento del pie y desaparece con el reposo, guarda relación con las estructuras que le permiten mover el pie al caminar. Entre esas estructuras están: un problema del Calcáreo, del tendón de Aquiles en su inserción en el calcáneo o un problema mayor de artritis articular de tobillo. También puede ejercer importancia el tipo de calzado que use que no sea el más adecuado.