La aftosis bucal parece relacionarse con distintos factores: genéticos, estrés, hormonales, infecciones virales y bacterianas, inmunológicas.
Además de la infección por virus del herpes, múltiples agentes pueden asociarse a este tipo de lesiones, por lo que una lista podría extenderse y escapar el objeto de esta plataforma. No obstante, puede estar tranquila, independientemente del tipo de virus involucrado, el manejo no sufre modificaciones importantes.
Según su relato, las lesiones pudieron aparecer como parte de una infección viral localizada o incluso en respuesta a factores estresantes como la fiebre, sin que el virus se encuentre localmente ubicado en la boca o cercanías.
Recuerde que la ampicilina es un antibiótico, que su uso debe realizarse bajo indicación médica y que carece de utilidad ante procesos infecciosos por virus. No es aconsejable que tome este tipo de medicación por su cuenta, puede agravar su estado o enfrentarse a condiciones adversas sin necesidad, además de incrementar la resistencia a antibióticos (un problema de salud pública).
Puede emplear geles orales que ayuden a cicatrizar las heridas, mantenga una buena hidratación y evite alimentos muy calientes o condimentados que puedan generar molestia mientras mejoran las heridas.