Un consumo excesivo de carne a largo plazo puede aumentar la concentración de ácido úrico (Hiperuricemia), aumentando el riesgo de presentar síntomas de gota. Una dieta adecuada es aquella donde se mezclen frutas, verduras, pocas grasas, pocos carbohidratos, proteína idealmente sin grasa, evitar el exceso de dulce, paquetes, gaseosas, embutidos.