Si existen alteraciones a nivel de la pituitaria (hipófisis anterior) que involucren la producción de hormonas como un aumento en la hormona de crecimiento, sí sería posible que perciba un aumento de su tamaño.
No obstante, a los 57 años, este crecimiento no sería armónico, es decir, no se vería simplemente más alta, sino que presentaría modificaciones en el rostro y las extremidades que le darían un aspecto algo deforme.
Si considera que puede estar presentando un crecimiento excesivamente anormal sería recomendable que realice un seguimiento de su talla y comente con su médico esta situación, más aún teniendo en cuenta sus antecedentes.