Sólo por la descripción del material expulsado no se puede afirmar que sí era un aborto. Pero ante la sospecha de que sí haya sido y dado que se tiene fiebre, es importante que se consulte pronto al servicio de urgencias, ya que se pueden tener un aborto retenido (sucede cuando no se expulsa por completo todo el material del embrión), esto genera infecciones bastante peligrosas, por lo que se necesita atención médica inmediata.