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Se pueden comer, no son dañinas.
Es un mito el pensar que estas semillas o pepas de las verduras o de frutas ocasiones alteraciones intestinales o en el aparato digestivo.
Por el contrario los estudios han encontrado que la semilla o pepita en su cáscara o cubierta externa contiene lignanos, ligninas y, además, rica en aceites o ácidos grasos esenciales, almidones o azucares, proteínas o aminoácidos y mucha fibra.
Por lo tanto son benéficas para la salud.
Espero haber resuelto su inquietud, si tiene alguna otra, no dude en contactarnos.