Tener la orina ligeramente turbia es normal, ya que es la característica que aparece en la orina de manera generalizada y en casi todos los exámenes de orina que se hacen. Lo anormal es que aparezca turbia o de un color diferente, con sedimento.
La presencia de hemoglobina es anormal, y la hematuria microscópica (más de 5 glóbulos rojos en el análisis de las células).