Es el procedimiento por medio del cual se introduce una aguja a una vena para realizar extracción de una muestra de sangre, aplicación de medicamentos o para remover glóbulos rojos de la sangre.
Se pone a la persona en una posición cómoda (habitualmente sentado), se ubica la vena a puncionar y se realiza asepsia y antisepsia de la zona cercana a dicha vena. Se introduce el catéter en la vena, se posiciona y se procede a tomar muestra de sangre o a introducir el medicamento.
En algunos casos se requiere ayuno de 8 horas.
Puede sentirse la molestia generada por el catéter en la vena, que puede ser doloroso.
Es posible que sienta debilidad, mareo, náuseas y fatiga.