Cesárea

La cesárea, es un procedimiento quirúrgico alternativo al parto vaginal o “natural”. En promedio, un 33% de los nacimientos son por este método.

Consiste en que por medio de una cirugía se realice una incisión en el abdomen inferior para acceder al útero, que es la cavidad donde se encuentra el bebé. Hay ciertas circunstancias que ameritan la cesárea como lo son:

• Trabajo de parto prolongado.
• Mala posición del bebé.
• Afección del bienestar fetal.
• Gemelos.
• Placenta en una posición anormal.
• Cesárea previa, o cuando el trabajo de parto se convierta en una urgencia para la madre y/o bebé. 

El resto de las circunstancias, deberán ser siempre evaluadas por el médico tratante; siempre velando por el máximo bienestar de la madre y el bebé.

La paciente debe estar preparada con antelación como en cualquier cirugía.

Se administrará anestesia para evitar el dolor, usualmente ésta es regional, es decir, se aplicará una inyección en la espalda baja denominada "anestesia epidural", que hará perder la sensibilidad de la cintura hacia abajo (en algunos casos, la anestesia deberá será total).

El profesional médico hará un corte tipo "bikini", arriba del pubis, se separan los músculos del abdomen y se accede al útero. Se realizará un segundo corte en el útero para extraer al bebé.

Se extrae el bebé, se corta y liga el cordón umbilical y se atiende al recién nacido.

Se extrae la placenta y se limpia la cavidad uterina con compresas. Se controla el sangrado.

Finalmente se sutura (cierra) el útero y la piel del abdomen.

1. Recortar el vello púbico de ser necesario (tricotomía).
2. Ayuno de al menos 8 horas.
3. Colocación de sonda vesical por personal hospitalario.
4. Colocación de catéter intravenoso.
5. Colocación de sonda intravesical.

La paciente no sentirá dolor, pero si los movimientos propios de la cirugía (sensación de presión, por ejemplo).

Dolor en la incisión abdominal durante los primero días.

Dolor con los movimientos corporales.