La celulitis, más allá de un asunto estético

Esa palabra causa pavor en las mujeres. La popularmente llamada piel de naranja es una condición de la que muchas quieren huir. Sin embargo, ¿has escuchado hablar alguna vez de celulitis infecciosa? Esa, lejos de la que altera la estética femenina también puede afectar a los hombres, en cualquier edad, pues asegura el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas que esta es una infección de la piel y los tejidos más profundos, a veces puede afectar el músculo, y es causada por bacterias que llegan al cuerpo cuando hay lesiones en la piel como heridas, quemaduras o cortes quirúrgicos.

Y es que, normalmente, en la piel habitan diferentes tipos de bacterias, pero cuando hay alguna ruptura pueden provocar la infección. Al principio, esta celulitis puede confundirse con un cuadro gripal común, dado que entre los síntomas se cuentan fiebre, escalofrío o inflamación de los ganglios linfáticos.

Otras señales más particulares son inflamación, erupción o enrojecimiento de la piel, apariencia de piel tensa o brillante, piel caliente en la zona de enrojecimiento, rigidez articular, pérdida de cabello en el sitio de la infección y náuseas o vómito.

Pero ¿quiénes tienen posibilidad de desarrollar la infección? Señala la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos que entre los factores de riesgo que provocan la celulitis están:

-Rupturas o descamación de la piel entre los dedos.

-Antecedentes de enfermedad vascular periférica.

-Lesión o traumatismo con ruptura en la piel (heridas cutáneas).

-Picaduras y mordeduras de insectos, animales o personas.

-Úlceras a causa de ciertas enfermedades, incluso diabetes y enfermedad vascular.

-Uso de medicamentos que deprimen el sistema inmunitario.

-Herida de una cirugía reciente.

¿Cómo tratar la celulitis?

Antibióticos orales y analgésicos es la solución, pues señalan los expertos que de 7 a 10 días con el tratamiento adecuado la infección desaparece. En casa se recomienda elevar el área infectada para reducir la inflamación, así como guardar reposo. Igualmente, se aconseja proteger la piel manteniéndola húmeda para prevenir fisuras, usar zapatos que ajusten bien y ofrezcan espacio suficiente para los pies, arreglar las uñas adecuadamente y usar el equipo de protección adecuado bien sea para practicar deportes o para trabajos específicos.

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