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Los 10 diez signos más frecuentes del Alzheimer

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Esta enfermedad, actualmente, afecta a más de 46,8 millones de personas en el mundo, con un crecimiento acelerado: un caso nuevo cada 3 segundos.

Si algún familiar, amigo o persona cercana fue diagnosticada con Alzhéimer, puede que no recuerde las cosas más importantes de su vida, haya cambiado su forma de pensar, su carácter, se desoriente en lugares conocidos, ponga objetos fuera de lugar y tenga problemas para hablar o escribir.

Pero si en unos audífonos escucha su música preferida, la que más le gustaba cuando era joven, cuando estaba vital, trabajaba y se divertía, va a comprobar que el Alzhéimer hace difusos los recuerdos, pero no los sentimientos.

Para comprobarlo la Fundación Acción Familiar Alzhéimer, entidad de beneficio social sin ánimo de lucro hizo un video con personas mayores alojadas en lugares especiales y sus familiares. Este video muestra las reacciones de los pacientes con Alzhéimer, cómo recuerdan sus sentimientos, cómo relatan los momentos vividos en sus mejores épocas, y cómo, acompañados de sus familiares y amigos, pueden adelantar diferentes actividades.

Cada año se diagnostican 4,6 millones de casos nuevos y uno cada 3 segundos. Se prevé que el progresivo envejecimiento de la población triplique el número de casos a nivel mundial de aquí al año 2050 alcanzando a cerca de 131,5 millones de personas.

La enfermedad

El Alzhéimer, descubierta en 1906 por el neurólogo alemán Alois Alzheimer, es catalogado como la demencia más frecuente alrededor del mundo. Se trata de una enfermedad degenerativa, irreversible e incurable que en forma lenta y progresiva destruye las células del cerebro, ocasionando pérdida de la memoria y de otras funciones mentales como la capacidad de raciocinio, de juicio, de orientación y problemas con el lenguaje, entre otras. Puede verse afectada cualquier persona sin distingo de raza, sexo, nivel educativo ni sociocultural. Las personas mayores de 60 años tienen más probabilidades de sufrir demencia, pero esta enfermedad también puede afectar a personas más jóvenes.

A pesar de su creciente impacto a nivel mundial, la falta de comprensión de la demencia contribuye a crear miedos y a aumentar la estigmatización. Demencias como la enfermedad de Alzhéimer, no solo afectan al individuo, también afectan y cambian la vida de los familiares. La demencia es una enfermedad gravemente incapacitante para aquellos que la padecen y suele ser devastadora para sus cuidadores y familiares.

El Informe Mundial 2012 de la ADI revela que casi una de cada cuatro personas con demencia (24%) oculta o disimula su diagnóstico por temor al estigma de la que son objeto. Otro aspecto importante es que el 40% de las personas con demencia se consideran excluidos de la sociedad y que dos de cada tres personas con demencia y sus cuidadores creen que hay una falta de comprensión de la demencia en sus países.

De acuerdo con Robinson Cuadros, geriatra y especialista en Alzheimer, “se calcula que hay cerca de 220.000 personas afectadas con la enfermedad en Colombia, teniendo en cuenta que esta cifra corresponde a un sub registro de la cifra oficial dado que las personas que son diagnosticadas han esperado entre 3 y 5 años antes de asistir a consulta para su identificar la enfermedad y establecer su diagnóstico, he ahí la gran importancia de definir estrategias de detección temprana”.

El especialista agrega que, “en Latinoamérica se calcula cada 3 segundos se diagnostica una persona con Alzheimer, una enfermedad prevalente en la vejez, por lo que debemos establecer estrategias de atención diferencial dada la transición demográfica que vive nuestro país, teniendo en cuenta el reporte de Helpage Internacional (global watch Septiembre 2015) donde indica que en Colombia las personas mayores presentan la mayor expectativa de vida por encima de los 60 años en la región (75 años) y la quinta en el mundo después de Japón, Mónaco, España y Francia”.

Los diez signos más frecuentes

  1. Pérdida de la memoria: el paciente olvida incluso la información recién aprendida.
  2. Dificultad para realizar tareas familiares: les resulta difícil planificar o completar las tareas diarias. Pueden perder la pista de los pasos en la preparación de una comida, hacer una llamada telefónica o durante un juego.
  3. Problemas con el lenguaje: pueden olvidar palabras simples o sustituyen palabras inapropiadas, por lo que su forma de hablar o escribir, en ocasiones, se vuelve difícil de entender.
  4. Desorientación en tiempo y lugar: un enfermo puede perderse en su propio barrio, olvidar dónde está y cómo llegó allí, y no sabe cómo regresar a casa.
  5. Falta o disminución del juicio: pueden vestirse inapropiadamente, usando varias prendas en un día caluroso o muy poca ropa en el frío. Ellos pueden mostrar poco juicio, como regalar grandes sumas de dinero.
  6. Problemas con el pensamiento abstracto: se pueden presentar dificultades para realizar tareas mentales complejas, como olvidar para que sirven los números y cómo deben ser utilizados.
  7. Perder las cosas: puede poner cosas en lugares insólitos: una grabadora en la nevera, o un reloj en la azucarera.
  8. Cambio en el estado de ánimo o el comportamiento: un paciente puede mostrar cambios en el estado de ánimo rápidamente desde la calma a las lágrimas o hasta la ira, sin razón aparente.
  9. Cambios en la personalidad: las personas pueden cambiar drásticamente, se muestran confundidas, desconfiadas, temerosas.
  10. Pérdida de la iniciativa: el paciente puede volverse muy pasivo, sentarse frente al televisor durante horas, dormir más de lo normal o no querer hacer las actividades habituales.
Natalia Ospina Vélez
Natalia Ospina Vélez https://www.1doc3.com

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