Si tienes una enfermedad del reflujo gastroesofágico que está afectando la laringe y la tráquea, aparte del tratamiento con inhibidores de la producción de ácido y protectores de la mucosa de las vías digestivas, puedes evitar la cirugía, siguiendo medidas generales que seguramente van a mejorar poco a poco tu problema, hasta lograr la curación, solo son cambios en el estilo de vida:
- Fracciona las comidas, trata de hacer 5 comidas diarias en porciones más pequeñas para que el estómago no quede tan lleno que su contenido se devuelva y el ácido gástrico irrita el esófago y las estructuras de la garganta y traquea
- Evita cenar y acostarte enseguida, come en forma ligera, dos a tres horas antes de irte a la cama
- Mastica muy bien y lentamente los alimentos
- Levanta 10 centímetros la cabecera de tu cama, para que el torso quede elevado y no se presente reflujo
- Evita los alimentos irritantes como las frituras, salsas, comidas rápidas, condimentos, picantes
- Evita las bebidas gaseosas, sodas, agua con gas, cafeína en exceso, licor y cigarrillo
- Consume los lácteos con prudencia, si te sientan mal, no los tomes, si no hay problema, toma un kumis o yogur diario, avena instantánea en leche, cereales de caja sin dulce en leche
- Prefiere los alimentos al vapor, a la plancha o al horno y preparados en casa, evita las comidas rápidas
- Puedes tomar sobre las comidas, antiácidos de venta libre como el alginato de sodio o el hidróxido de aluminio, te ayudarán a disminuir la acidez.
Estas recomendaciones no van a ser para toda la vida, ponlas en práctica por 8 a 10 semanas para disminuir la inflamación en tus vías digestivas y vías respiratorias.
Espero haberte orientado, ante nuevas dudas escribenos a la plataforma.