- En el primer caso, por las características que menciona de su dolor, es probable de que se trate sólo de alguna afección muscular, como una contractura o un pequeño desgarro que a veces ocurre cuando hacemos fuerza, adquirimos posturas incómodas o cargamos inadecuadamente algún peso desde el suelo. Si no tiene otros síntomas agregados a su dolor, como ardor al orinar, necesidad de ir muchas veces al baño, fiebre o que la orina salga con alguna característica, como muy espumosa, entonces es probable que no se trate de ninguna afección al riñón, sino más bien de tipo muscular. En este caso le recomiendo hidratarse bien; reposar su zona lumbar evitando movimientos bruscos, dormir en una postura cómoda para la zona lumbar (por ejemplo, boca hacia arriba), no cargar nada pesado y aplicarse compresas tibias en la zona del dolor. Si tiene mucha molestia puede apoyarse de algún antiinflamatorio de venta libre.
- En el caso de sus mareos, esto es algo que puede ocurrir por varias causas, una de las más comunes de mareos es el llamado Vértigo Paroxístico Benigno, en el cual por diversos motivos, las personas presentan mareos cuando adquieren una determinada posición sobre todo de la cabeza. Generalmente es un cuadro que no genera grandes complicaciones. Existen algunos ejercicios que se pueden realizar y que ayudan a las personas con este tipo de padecimientos, por ejemplo, con la maniobra de Epley. Además, evite incorporarse bruscamente desde una posición sentado o acostado y evite hacer movimientos bruscos con la cabeza.
Es importante que si a pesar de estas recomendaciones, ambos síntomas continúan manifestándose, debe acudir con su médico para que le efectúa una revisión física y pueda establecer un diagnóstico para ambos casos. El tratamiento médico que reciba dependerá de los síntomas que presenta.
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