Tanto al nacer como al morir tenemos la misma cantidad o número de huesos, lo que pasa es que con el aumento de la edad los huesos se van osificando (llenándose de calcio). Por eso es que en un bebé pequeño no se ven los huesos, pero van saliendo en la radiografía a medida que va avanzando la edad.
Al igual en las personas mayores, todos los huesos se van desgastando y se ven menos en la radiografía... pero eso no quiere decir que se tenga menor número de huesos.