Abuso de antibióticos, un riesgo para tratamiento de enfermedades de transmisión sexual

Generar resistencia por este tipo de medicamentos se convierte en una amenaza inminente para tratar este tipo de enfermedades, pues disminuye las posibilidades terapéuticas.

La Organización Mundial de la Salud, OMS, fue clara: la clamidiasis, la gonorrea y la sífilis son infecciones de transmisión sexual, ITS, provocadas por bacterias y por lo general pueden curarse con antibióticos. Sin embargo, el abuso de estos medicamentos enciende las alarmas, pues la creciente resistencia a ellos hace que estas tres enfermedades sean cada vez más difíciles de ser tratadas “porque algunos antibióticos están perdiendo eficacia a raíz de su uso indebido o excesivo. Se calcula que cada año 131 millones de personas contraen clamidiasis, 78 millones contraen gonorrea y 5,6 millones contraen sífilis”, señala la OMS.

Si bien la resistencia de las enfermedades a este tipo de tratamientos es preocupante, resulta más delicado saber que si las ITS no se diagnostican ni se tratan a tiempo pueden generar complicaciones. En las mujeres, por ejemplo, puede provocar enfermedad inflamatoria pélvica, embarazo ectópico (el que ocurre fuera del útero) y aborto. Si no se tratan, la gonorrea y la clamidiasis pueden provocar infertilidad tanto en hombres como en mujeres. “La clamidiasis, la gonorrea y la sífilis también pueden duplicar o triplicar el riesgo que corre una persona de infectarse por el VIH. Una ITS no tratada durante el embarazo aumenta el riesgo de mortinatalidad y de muerte neonatal. La clamidiasis, la gonorrea y la sífilis son importantes problemas de salud pública en todo el mundo: menoscaban la calidad de vida de millones de personas y provocan patologías graves e incluso la muerte. En las nuevas directrices de la OMS se reitera la necesidad de tratar estas ITS con los antibióticos adecuados, en las dosis correctas y en el momento oportuno con el fin de reducir su propagación y mejorar la salud sexual y reproductiva”, advierte el organismo de salud.

¿Qué tanto sabes de las ITS?

Son múltiples las enfermedades que por esta vía se pueden contraer. No obstante, en esta ocasión hablaremos de las tres sobre las que hace énfasis la OMS.

Gonorrea: puede aparecer tanto en hombres como en mujeres y puede manifestarse en los genitales, el recto y la garganta, incluso, puede contraerse mediante la práctica de sexo vaginal, oral o anal. Explica el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, CDC, que es una infección muy común, especialmente en las personas jóvenes de 15 a 24 años y, aunque, los primeros síntomas son leves, en las mujeres puede provocar hemorragias entre los períodos menstruales, dolor al orinar y aumento de las secreciones vaginales.

Sífilis: explica la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos que, en la etapa temprana, la sífilis suele causar una llaga única, pequeña e indolora. Algunas veces, causa inflamación de los ganglios linfáticos cercanos. Si no se trata, generalmente causa una erupción cutánea que no pica, frecuentemente en manos y pies. Muchas personas no notan los síntomas durante años. Los síntomas pueden desaparecer y aparecer nuevamente. El gran problema de esas llagas es que son puerta de entrada fácil para el contagio de VIH.

Clamidiasis: en las mujeres esta infección puede desarrollarse en el cuello del útero, el recto o la garganta. En el caso de los hombres, en la uretra (el interior del pene), el recto o la garganta. Hay que aclarar que esta infección puede reaparecer en una persona que ya la haya adquirido, mediante relaciones sexuales sin protección con alguien infectado.

Está claro que tener una pareja estable y acudir a métodos como el condón son las primeras medidas para evitar el desarrollo de este tipo de infecciones. Sin embargo, usar preservativo no es la única opción existente para cuidarse.